Pueblo de Dios, la venida de nuestro Señor Jesucristo está a las puertas y mientras más se acerca, más se acrecienta la batalla. Sé que ustedes lo experimentan en el espíritu y en la carne. Cada segundo cuenta. Amada iglesia, por eso es necesario que nos vistamos con toda la Armadura del Espíritu Santo, porque la lucha no es contra carne ni sangre, no es contra nuestro hermano, familiar o vecino, sino contra gobernadores, potestades, huéstes de maldad en los lugares altos, contra toda clase de espíritu inmundo para desviarnos del propósito de Dios.
La Palabra nos dice que si el Señor no acortara los dias de su venida, ninguno seria salvo. Las noticias revelan la desesperación, frustración e ignorancia de la humanidad. Es por esto que hemos sido llamados a llevar este mensaje a tiempo y fuera de tiempo... el tiempo se agota!!!!! Llegará el tiempo en que querrán escuchar la Palabra de Dios y no podrán. El momento es ahora!! Todavia hay esperanza, el enemigo planea su máximo bombardeo contra la humanidad, se está fraguando en los aires y muy pronto se desatará algo infernal, aún peor y más terrible que lo que hemos experimentado hasta ahora.
Llénate de su presencia, de su Espíritu, de su poder... de su unción. Siento en mi espíritu un mover tremendo de parte del enemigo, pero Dios es más poderoso y nos guardará y dará la victoria. Sólo bajo sus alas estaremos seguros porque con nuestras fuerzas seríamos derribados.
El tiempo se acaba iglesia, ni un alma mas para satanás!! Pelea, pelea, pelea!!!
El que tiene oido, oiga lo que el Espíritu le dice a las iglesias! Apocalípsis 3:33
Revelado a Leillan Rivera, sierva de Jesucristo
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